"Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al padre, sino por mí."
Juan 14:6
Hoy
encendemos la segunda vela de Adviento: vela que simboliza el AMOR, el Camino y la Paz.
Cuándo se acerca el tiempo de Navidad, los que creemos en Cristo y los que todavía no lo han hecho, tienen en común el deseo de paz y amor, y esto se refleja en nuestra manera de felicitarnos unos a otros y en el deseo que durante estos días, desaparezcan los conflictos en el mundo e incluso los cotidianos de nuestro día a día.
Debería ser un deseo permanente en los seres humanos, pero que por nuestra naturaleza, es difícil mantener, ya que esa paz y ese amor, cuando tiene que propiciarla el ser humano, siempre tiene fecha de caducidad…
No ocurre lo mismo con el amor de Dios; es el único eterno, el que perdura en cualquier fecha y circunstancia, y del que Sus hijos somos receptores.
También hoy recordamos que Jesús es el camino: el ÚNICO camino a la Salvación, y el que nos libró de nuestros pecados, sacrificándose como ese “cordero” sin mancha. Sigamos Sus pasos, ahora y siempre…
Compartamos, ese amor y esa paz que Dios nos da, ¡no solo en estos días!, seamos también los que indiquemos el “camino” de salvación a los que nos rodean: siendo reflejo del carácter de Dios todo el año, y el resto de nuestra vida…
Ten un buen día.
Cuándo se acerca el tiempo de Navidad, los que creemos en Cristo y los que todavía no lo han hecho, tienen en común el deseo de paz y amor, y esto se refleja en nuestra manera de felicitarnos unos a otros y en el deseo que durante estos días, desaparezcan los conflictos en el mundo e incluso los cotidianos de nuestro día a día.
Debería ser un deseo permanente en los seres humanos, pero que por nuestra naturaleza, es difícil mantener, ya que esa paz y ese amor, cuando tiene que propiciarla el ser humano, siempre tiene fecha de caducidad…
No ocurre lo mismo con el amor de Dios; es el único eterno, el que perdura en cualquier fecha y circunstancia, y del que Sus hijos somos receptores.
También hoy recordamos que Jesús es el camino: el ÚNICO camino a la Salvación, y el que nos libró de nuestros pecados, sacrificándose como ese “cordero” sin mancha. Sigamos Sus pasos, ahora y siempre…
Compartamos, ese amor y esa paz que Dios nos da, ¡no solo en estos días!, seamos también los que indiquemos el “camino” de salvación a los que nos rodean: siendo reflejo del carácter de Dios todo el año, y el resto de nuestra vida…
Ten un buen día.
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