"La vida te da sorpresas"... a veces buenas y otras no tanto... es por eso, es que debemos tener bien desarrollados nuestros "músculos espirituales" porque sino, no tendremos la capacidad de soportar con más o menos dignidad el momento difícil que en cualquier momento y de forma inesperada nos puede salir al encuentro.
"Nada he traído a este mundo,
y nada me voy a llevar.
¡Bendigo a Dios cuando da!
¡Bendigo a Dios cuando quita!"
Job 1:21
Job, es un ejemplo de ¡"músculo espiritual" bien tonificado!; porque a pesar de vivir en la abundancia, fue capaz, de enfrentar dignamente el dolor físico, la perdida de sus seres queridos y de todas sus pertenencias, (además, de tener soportar a su mujer, -que en semejante situación- no era precisamente "ayuda idónea" y a sus pésimos amigos: - con amigos así, ¡quién necesita enemigos!)
"Y a pesar de todo lo que le había sucedido, Job no ofendió a Dios ni le echó la culpa."
Job 1:22
Al contrario que Job, nuestro primer impulso ante los contratiempos es preguntar al Señor por qué, y enfadarnos... y la verdad es que no es "práctico" (echad la vista atrás, y recordad si esta actitud os sirvió de algo, ante los contratiempos...) Os animo a, encajar el golpe con esperanza y sobre todo en dependencia de la misericordia de Dios para sobrellevarlo; sin duda: ¡nos ira mucho mejor!
Miramos al cielo tranquilos y confiados de que Dios está en control de todas las situaciones...

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muy pronto, se publicará tu comentario.
¡Muchas gracias por tu aportación!