2ª Epístola a los Corintios III:Reconciliación...

En la primera sección de esta carta; -el prólogo-, aparece continuamente el término CONSOLACIÓN, y es que Pablo escribe esta Carta, tras recibir las noticias que Tito trae de Corinto; -recordemos-, que Tito, fue el encargado de llevarles la "Carta de las lágrimas", en la cual, Pablo con gran pesar y dolor, les llama la atención y les corrige sobre su mal comportamiento-. Parece que esta carta ¡tuvo efecto! y la actitud de los Corintios cambió, y Tito, de vuelta, trae buenas nuevas del cambio, produciéndose la reconciliación entre ambas partes.

Debemos aprender de este conflicto entre Pablo y la iglesia de Corinto, algo: ¡muy importante!: cuándo tenemos problemas dentro de la iglesia, debemos cuanto antes hablar de ello, y llegar a conciliar puntos de vista!. El perdón entre las partes, es lo que trae CONSUELO a los  implicados.

En la segunda sección de la estructura de esta Carta, se abordan temas pastorales, como su decisión de enviarles la "Carta de las lágrimas" en vez de visitarles;

"Mas yo invoco a Dios por testigo sobre mi alma, que por ser indulgente con vosotros no he pasado todavía a Corinto."

2ª Corintios 1:23

Si Pablo, hubiese ido en persona a Corinto, -para llamarles la atención-, en vez de escribirles, ¡fue una muestra de indulgencia! ya que en persona, -probablemente-, su severidad a la hora de exhortarles, les hubiera distanciado más que reconciliado... 

"Por esto decidí no hacerles otra visita que les causara tristeza."

"pero cuando les escribí esa carta, me sentía tan preocupado y afligido que hasta lloraba. Sin embargo, no la escribí para causarles tristeza, sino para que vieran el amor tan grande que les tengo."

2ª Corintios 2:4

El tono de esta segunda sección, es pastoral pero firme, les anima a perdonar y a no dar lugar al diablo, -que es experto- en sacar beneficio de los conflictos que se dan en la iglesia, y a que sea el Espíritu el que guíe todo lo que hagan.

Habla también de sus sufrimientos como apóstol de Jesús, pero siempre con GOZO en medio de las tribulaciones.

Mañana continuamos moviéndonos por la estructura de esta Epístola.



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